Hola Johanna,
Al leer algunos de tus poemas me quedé prendida de Mujer de Niebla, lo entiendo con la voz que llegó a mis oídos, como el olvido que hemos sido y que seremos. Es una imagen bellísima y muy significativa para designar en lo que nos convertimos después de un adiós; aunque hay muchas mujeres de niebla, invisibles, que no se muestran; amores callados y algunos ocultos.No puedo dejar de mencionar también a “Espera”, la mujer en el rincón esperando que le enjugue sus lágrimas el mismo que de nuevo la hará llorar.“Miedo” tiene una figura hermosa cuando se niega a esculpir su amor en el vientre. Esa sola frase es un poema.Traté de expresar las impresiones que me dejaron tus poemas, pero como sabes, no es posible. Un buen poema, como un buen cuento o novela, se transforma en una sensación duradera y muy difícil de llevar a las palabras. Además sólo soy una lectora, no tengo mucha pericia en la crítica; mis observaciones son viscerales, y mis vísceras dicen que esos poemas, junto con “Ciudad”, alcanzaron a traducir en una corta imagen: un pensamiento, una realidad que se puede alcanzar y permite alguna identidad del lector con la intención de la autora.un abrazo, Emperatriz Muñoz